lunes, 30 de noviembre de 2009

Sí, no, NS/NC


Un mismo acto, el de introducir un voto en una urna, se repitió infinidad de veces en tres países este domingo. Un ejercicio democrático con matices muy, pero que muy diferentes.

SÍ. Uruguay. Según los primeros sondeos, José Pepe Mujica, ex guerrillero de 74 años se impuso por seis puntos al candidato del liberal Partido Nacional, Luis Alberto Lacalle. El único incidente reseñable durante estos comicios fue una intensa tormenta que inundó algunas zonas del país y obligó a evacuar a 6.000 personas en los departamentos de Paysandú y Treinta y Tres. Aun así la jornada electoral se desarrolló con normalidad y con un alto índice de participación.

NO. Guinea Ecuatorial. El presidente Teodoro Obiang, quien ascendió al poder hace ahora 30 años al derrocar mediante un golpe de Estado a su tío Francisco Macías Nguema, primer presidente del país desde la independencia de España (1968); revalidó su mandato con el 96,7% de los votos. Según los datos facilitados por las agencias, los cuatro aspirantes de los partidos de la oposición de este país rico en petróleo obtuvieron unos resultados meramente marginales. Buenaventura Mansuy, de la coalición Social Demócrata (PCSD), logró el 0,04% de los sufragios; Carmelo Mba de Acción Popular (AP) tuvo un 0,04%; Plácido Micó de Convergencia para la Democracia Social (CPDS) alcanzó un 0,7% de los votos, mientras que la Unión Popular (UP) de Archivaldo Montero Biribe tuvo un 0,05% de las papeletas.
Lógicamente, todos ellos han denunciado el fraude electoral que no ha podido constatarse por medios independientes al haber regateado el régimen a la prensa y las ONG internacionales.

NO SABE/NO CONTESTA. Honduras. Porfirio Lobo, también conocido como Pepe, se impuso en los comicios celebrados en el polvorín hondureño con más del 55% de los votos. Si me apuran, parece el mejor resultado posible ya que Lobo no pertenecía al Partido Liberal del que proceden tanto Zelaya como Micheletti, presidente depuesto y golpista respectivamente.
No obstante, las versiones son contradictorias. Mientras, unos, los partidarios de Zelaya, denuncian acoso militar y escasa participación; los otros, subrayan la ausencia de incidentes y la normalidad.
Zelaya, todavía encerrado en la embajada de Brasil, ya ha solicitado la anulación de los comicios por una supuesta abstención del 65% en todo el país.
Para añadir más leña al fuego, el recuento del 40& de los votos por parte del Tribunal Superior Electoral se va a retrasar debido a un supuesto error informático.

PD: Otro día hablaremos del referéndum celebrado en Suiza (57% de los votos a favor con un 55% de participación) por el que se prohibirá la construcción de minaretes en las mezquitas que se construyan en el país helvético en el futuro. Sin duda, el tema también tiene su miga.

domingo, 29 de noviembre de 2009

Secuestro, vivo o muerto


Aunque el título pueda sonar a película de Hollywood, lo cierto es que la realidad vuelve a superar a la ficción una vez más.
No cabe duda de que los secuestros son el pan nuestro de cada día. Según un estudio publicado por la ONG holandesa IKV Pax Christi, atendiendo a las cifras oficiales publicadas en 2006, fueron cometidos al menos 25.000 secuestros en ese año a nivel mundial. Y eso que, recalcó, las frías estadísticas encubren algunos casos que no llegan a ser denunciados ante las autoridades y que, China, con su ingente población, no aparece en dicho análisis puesto que el Gobierno asiático no aporta datos. Aún así, este movimiento por la paz mantiene que con base en estimaciones confiables, resulta verosímil pensar que el número real de casos de secuestro haya sobrepasado los 100.000.
Atendiendo al número total, México encabeza esta macabra lista por delante de Irak, India, Sudáfrica y Brasil. Si analizamos la cantidad en función del número de habitantes que hay en cada país, Irak sobrepasaría a México, siendo el tercer lugar para Chechenia, el cuarto para Ecuador y el quinto para Brasil.
En el estudio (de 68 páginas), se abordan las diferentes situaciones en cada uno de los países y la forma de actual de los Gobiernos. Curiosamente, nuestro país cuenta con su particular espacio referido concretamente al secuestro del Playa de Bakio. (que lejano queda ya, ¿verdad?).
No obstante, confieso que el origen de este artículo no respondía tanto a dicho estudio. Es más, confieso que di con él mientras buscaba datos concretos respecto al número de secuestros habidos en el mundo en los últimos años para contextualizar otra información.
La ‘culpable’ y el origen de todo fue Nieves Concostrina y su espacio de Radio 5 Todo Noticas: Polvo Eres. Un ‘quesito’ que trata sobre temas relacionados con la muerte desde un punto de visto desenfadado e instructivo.
El caso es que durante la semana que ya termina, Nieves sacó a la luz dos casos con un denominador común: el secuestro de cadáveres. El primero, en Austria; el segundo en Galicia. Cada uno con su propia idiosincrasia. Y lo más preocupante: no son, ni mucho menos, casos aislados.
En Austria, el protagonista muy a su pesar es Friedrich Karl Flick, un millonario que vivió atormentado con la posibilidad de un secuestro y que ha visto como éste llegó cuando yacía bajo tierra. Los hechos tuvieron lugar hace un año, por lo que el delito, en caso de capturar a los secuestradores, habría prescrito. Porque claro, al tratarse de un muerto, el Código Penal austriaco entiende que sólo hubo un atentado contra la tranquilidad del difunto y no secuestro. Por si el asunto no fuera suficientemente llamativo, diversas teorías apuntan a que la banda fue la misma que trato de secuestrar hace tres años el cadáver de la madre de Arnold Schwarzenegger.
¿El objetivo? Al igual que en el caso del secuestro de ‘personas vivas’, obtener un jugoso rescate ya que, según parece, Flick dejó tras de sí una fortuna de 6.000 millones de euros.
Por su parte, en el caso hispano, la trama es aún más retorcida o eso parece.
Hace dos años falleció un rico empresario. Como siempre, la viuda y sus tres hijas reconocidas se repartieron la herencia, pero en estas surgió un supuesto cuarto hijo que reclamó su parte. El juez ordenó tomar una serie de muestras al cadáver, pero, al acudir al nicho, se lo encontraron vacío.
Lógicamente, la familia legal del empresario asegura no saber nada del asunto y ha denunciado la desaparición, pero se antoja extraño que, si lo hubieran secuestrado para obtener dinero (en vez de para evitar las pruebas de ADN), los delincuentes no hayan solicitado algún rescate.
Sea como fuere, está claro que los secuestros no nos dejarán dormir tranquilos ni en esta, ni en la otra vida.

viernes, 27 de noviembre de 2009

El irresistible atractivo del ruido


Corrupto, espía, embustero, ineficaz, pirata, irresponsable, sólo hablaré contigo si me acompaña un abogado, insensato, desmembrador del país, reaccionario, cobarde, difamador, barriobajero, mentiroso, vulgar, te gustaría ir de madrugada a mi casa y que yo apareciera boca abajo en una cuneta.
No, tranquilos, que no me he peleado con nadie esta mañana. Sólo adoptaba el papel de un político español medio. Porque lo cierto es que, si no todos, un número mayor del que me gustaría, nos ofrecen espectáculos lamentables de insultos y descalificaciones hoy, sí y mañana, también. El ‘y tú más’ es el pan nuestro de cada día en los diferentes escenarios de representación pública.
Las ideas y el contraste de programas quedan, no ya en segundo plano, sino olvidados en el baúl de los recuerdos de Karina. ¿Por qué? Porque no interesa a nadie. Quizás, si existieran verdaderos debates, comprobaríamos que los dos grandes bloques, principales protagonistas de estos bochornosos espectáculos, se asemejan en demasía y eso iría en perjuicio de su batalla electoral. Por eso interesa la gresca y cuanta más mejor.
Pero CUIDADO, ¿QUÉ VEN MIS OJOS? Será una alucinación o realmente vislumbro un oasis en mitad del desierto. Allí, a lo lejos, creo distinguir las figuras de Josep Antoni Duran Lleida, José Antonio Alonso, Soraya Sáenz de Santamaría y Josu Erkoreka portavoces de CIU, PSOE, PP y PNV respectivamente. DIANTRES, SI HASTA SONRÍEN MIENTRAS SE DAN LA MANO.
¿Acaso nos encontramos en un universo paralelo? ¿Acaso me abdujeron los extraterrestres mientras dormía? La respuesta a la segunda pregunta es negativa (vamos, eso creo, vaya usted a saber). La primera, en parte es positiva. Puesto que hablamos del universo paralelo de la Unión Europea.
Y es que, la foto de hermanamiento correspondía a la firma de un acuerdo para la presidencia española de la UE el próximo semestre. Entre los objetivos perseguidos: dinamizar la economía para salir de la crisis, promover la igualdad y fortalecer la operación Atalanta contra la piratería en el Indico.
Hostia, tres asuntos de enorme trascendencia en nuestro día a día y que son motivos de constantes reproches e insultos en el Congreso de los Diputados. Dentro de nuestras fronteras los acuerdos se antojan imposibles, pero fuera no.
¿Estamos locos o es un ejemplo más de la bajeza de nuestra clase política?
Y lo que es aún peor. Ningún diario nacional destaca esta circunstancia prácticamente inédita en su portada. De hecho, centrándome en El País y en El Mundo (no puedo estudiar en profundidad todos los periódicos), el primero le dedica sólo una fotonoticia en la sexta página de la sección nacional; el segundo, ni siquiera eso.
Se ve que el periodismo se ha contagiado de nuestros políticos y sólo se sienten atraídos por el ruido de sables. Incluso aunque esa pugna sea artificial, falsa y un descrédito para todos nosotros.

jueves, 26 de noviembre de 2009

SIP quiero


¡Qué bonito es el amor! Tan lindo que su esencia trasciende épocas, costumbres y protagonistas. Nos equipara, nos iguala por muy distintos que seamos. Si no me creen, sigan leyendo:

Primera historia de amor; hace muchos, muchos años: Él esperaba galante en la plaza. Su porte, como siempre, era noble aunque no aristocrático. Todos los vecinos del lugar sabían de su riqueza y, pese a ser superado por muchos terratenientes, no dejaba de ser un partidazo para todas las damas de toda la comarca. Incluso de otras regiones, acudían mujeres tratando de conquistarle para asegurarse un futuro mejor.
Ella acudió a su encuentro, solícita. A diferencia de su futuro marido, procedía de una familia humilde, pero ello no restaba méritos a su hermosura. Esbelta, con buenos modales y una reputación intachable.
Era una unión bendecida por todos y, especialmente por el párroco, autoridad moral en aquellas tierras. Un sacerdote que observaba con preocupación como las semanas, los meses y casi hasta los años se escapaban veloces y esas uniones tan requeridas por el pueblo y tan necesarias para garantizar la supervivencia de la especie, se dilataban interminablemente en el tiempo.
Sin embargo, viéndoles, tan felices, en medio de la plaza, mostrando sin pudor, pero con una mesura incontestable su cariño por el otro, estaba seguro de que pronto darían el paso, se darían el ‘Sí quiero’ bajo el manto de la autoridad máxima y entonces todo sería un poquito más fácil.

Segunda historia de amor; hace pocas, pocas horas: Él, Cajasol, esperaba galante. Su porte (30.003,6 millones de activos totales; 21.733,1 millones de euros en créditos concedidos; 23.051,7 millones de depósitos captados; 1.606,4 millones de patrimonio neto y 28.397,2 millones de pasivo), era noble aunque no aristocrático. Todos sabían de su riqueza y, pese a ser superado por otras cajas de ahorro, no dejaba de ser un partidazo para todas aquellas entidades más humildes tanto de su comunidad como de otras vecinas.
Ella, Caja de Guadalajara, acudió a su encuentro, solícita. A diferencia de su futuro marido, procedía de una familia humilde (1.709 millones de activos totales; 2.797,1 millones de euros en créditos concedidos; 1.427,2 millones de depósitos captados; 65,2 millones de patrimonio neto y 1.643,7 millones de pasivo), pero ello no restaba méritos a su hermosura, marcada especialmente por esa nueva Torre recientemente estrenada como sede de la entidad.
Era una unión bendecida por todos y, especialmente por Miguel Ángel Fernández Ordóñez (MAFO), gobernador del Banco de España y partidario de la fusión de un tercio de las 45 cajas de ahorros que hay en España. Una autoridad que observaba con preocupación como las semanas, los meses y casi hasta los años se escapaban veloces y esas uniones tan requeridas y tan necesarias para garantizar la supervivencia del sector, se dilataban interminablemente en el tiempo.
Sin embargo, viéndoles, tan felices, en sus respectivos Consejos de Administración, mostrando sin pudor, pero con una mesura incontestable su deseo de unirse con el otro e incluso con alguna otra entidad (concretamente Caja de Badajoz, Caja de Extremadura y CajaGranada), estaba seguro de que pronto darían el paso y abordarían una fusión virtual bajo la figura de un Sistema Institucional de Protección (SIP) en la que ambas entidades mantendrán sus marcas y actividades de obra social por separado.

¡¡Vivan los novios!!

miércoles, 25 de noviembre de 2009

Los forzados de la ruta


De una forma casual, fui a parar con la portada de este espectacular libro sobre los puertos míticos del Tour de Francia. Un libro que no aparece en mi biblioteca porque no dominó el francés, pero que sí que he ojeado a través Google Books. Para todos aquellos que disfruten con este deporte y también para todos los que gusten de la fotografía y de la épica, les aconsejo que le echen un vistazo. Es verdaderamente impresionante (eso sí, advierto que no soy objetivo en esta materia jeje).
Al verlo recordé un libro editado recientemente en castellano, pero escrito allá por 1924. Su autor, Albert Londres que, pese a su apellido, era francés e investigando descubrí (oh, gran wikipedia, nosotros te adoramos...) que fue uno de los fundadores del periodismo de investigación, crítico de los abusos del colonialismo y las prisiones de trabajos forzados.
El caso es que durante aquel 1924 cubrió la información del Tour de Francia y, en una de sus crónicas, fue cuando creó esa expresión conocida por todos de "Los forzados de la ruta" y que da nombre al libro (en realidad se escogió el término 'carretera' en lugar de ruta, pero bueno). Su particular relato y denuncia de aquellos días son los que conforman las páginas de este libro que, éste sí, es probable que ocupe un lugar en mi biblioteca.
Como muestra, os dejo un par de párrafos recogidos en sus páginas y obtenidos a través de un reportaje del diario Público y del blog Pedaleando.


Existen fantasistas que se tragan ladrillos y otros a ranas vivas. He visto a faquires que ”escupen” plomo fundido. Son personas normales. Los verdaderos chiflados son algunos iluminados que el 22 de junio abandonaron París para comer polvo. Los conozco bien; formo parte de ellos.

A los chicos se les prometieron premios, no camillas.

Tienen el sol, tienen el polvo, tienen las nalgas sobre el sillín desde las dos de la madrugada y son las seis y media de la tarde.

Un corredor está detenido en la carretera; no repara su bicicleta, sino su rostro. Sólo posee un ojo vivo, el otro es de vidrio. Se saca su ojo de vidrio para quitarle el polvo: "Sólo hace cuatro meses que lo tengo, todavía no estoy acostumbrado". Se trata de Barhélemy. Lo perdí por culpa de una piedra suelta en la carretera. Tapona su órbita.

- No tienen idea de lo que es el Tour de Francia -dice Henri-, es un calvario. Y aún, el camino de la cruz solo tenía 14 estaciones, mientras que el nuestro tiene 15. ¿Sufrimos sobre la carretera, pero quieren ver cómo vamos? Tenga...
De su bolso, saca un frasco:
- Esto es cocaína para los ojos, y eso cloroformo para las encías.
- Esto, dice Ville, es pomada para calentar las rodillas.
¿- Y píldoras, quieren ver píldoras?
Sacan 3 cajas cada uno.
- En resumen , dice Francis, vamos con dinamita.
¿Aún no han visto el baño, a la llegada?. Cuando nos quitamos el barro, estamos blancos como sudarios. La diarrea nos vacía. (...) cuando descendemos de la máquina, se puede pasar a través de nuestros calcetines, a través de nuestros calzones, ya no queda más que el cuerpo.

martes, 24 de noviembre de 2009

El nuevo significado de UE


Bajo perfil, falta de carisma, minilíderes y sobre todo, grises. De estas y otras muchas formas igual de cariñosas recibieron buena parte de los medios de comunicación nacionales los nombramientos de Herman Van Rompuy y Catherine Ashton para los cargos de presidente permanente del Consejo Europeo y ministra de Exteriores de la Unión Europea respectivamente.
Lo primero que quisiera decir al respecto es que, al menos de cara al gran público, salvo contadísimas excepciones (véase Tony Blair, Felipe González o, por aquello de ser patrio, Miguel Ángel Moratinos), cualquier elegido habría resultado gris (muestra de lo poco que la UE ha calado y sigue calando en la sociedad).
A continuación, permitidme que me tire a la piscina en el caso del nuevo presidente. Creo que su elección puede ser acertada y no sólo porque sea un buen aficionado al ciclismo (que todo pesa y eso, en concreto, pesa bastante jeje), sino porque si logró pacificar Bélgica (flamencos y valones anduvieron a tortas durante demasiado tiempo), por qué no soñar con que sea capaz de tejer acuerdos globales en los que, como poco, prevalezca el llamado mínimo común denominador (un mínimo que esperemos sea siempre lo más amplio posible).
Menos optimista soy con la baronesa británica. Ni ella misma se lo podía creer porque ni aspiraba, ni soñaba con el cargo. Su elección fue fruto de la pillería del primer ministro del Reino Unido y del progresismo cutre de Zapatero. El primero jugó la carta de Blair para, sabedor de que el resto se negaría al impulsor de la Tercera Vía, obtener después sus demandas en compensación.
El segundo, por el contrario, siguió los dictados de su colega (de esta forma evitaba quedarse sin su ministro de Exteriores, otra de las opciones que se barajaron los días previas, a escasas jornadas de asumir la presidencia rotatoria de la UE), y dio prioridad a dar representación a las mujeres en la élite de la UE (dije cutre porque estoy en contra de que esas políticas a favor de una representación igualitaria; si tres mujeres son merecedoras de los altos cargos, quiero que lo obtengan y no incluir a un hombre que a lo mejor es menos válido y viceversa).
Teniendo en cuenta que el grupo Popular ya tenía su candidato varón para ocupar el cargo de presidente, los socialistas eligieron a la única mujer que propuso Brown que, de esta forma, se ganaba un aura de buen diplomático (renunciaba a su primera petición) y colocaba a un representante de su país en la vicepresidencia y como alto representante de la Política Exterior. Y todo ello cuando el pobre hombre está más que desahuciado por los sondeos en su propio país.
No obstante, la gran conclusión de estos nuevos nombramientos y del resto de los miembros de la Comisión, con menos atención mediática, pero también importantes; es que la UE se desliza definitivamente hacia el ámbito económico obviando la unión política.
El eje que tira de los 27 (Alemania y Francia), ha renunciado a colocar a sus candidatos en los dos primeros puestos del escalafón para centrarse en las carteras económicas.
Con Van Rompuy y Ashton como cabezas visibles de la UE en lo político, Sarkozy y Merkel (así como Brown y hasta Zapatero), mantendrán un mayor brillo en las fotos de las grandes cumbres junto a Obama, Hu Jintao, Putin, etc. Mientras, con sus delfines a los mandos en las principales cuestiones económicas, los motores de Europa gozarán de un importante margen de maniobra y poder.
La UE vivió una histórica jornada el pasado día 19. Tanto que aunque las siglas no cambian; su contenido, sí. Se confirma que UE quiere decir Unión Económica. Los que quieran algo más... que busquen nuevos horizontes.

domingo, 22 de noviembre de 2009

Imagen


Ya comenté hace días mi opinión acerca del affaire Alakrana, pero hoy voy a abordar la cuestión desde un punto de vista muy distinto. Una entrada que ve la luz hoy, pero que rondaba mi cabeza desde hace días y se convirtió en inexcusable el pasado sábado.
Horas antes, el día 20 de noviembre, los marineros del Alakrana, ya liberados en las islas Seychelles se fundían en abrazos con buena parte de sus familiares.
Recordemos que fueron 36 los liberados y que, hablo de memoria, entorno a 15 familias no se desplazaron por diversas causas a Puerto Victoria. Esto es, nos quedan 21 reencuentros. Sin duda, un paraíso para cualquier reportero gráfico. Era asunto claro de apertura de los distintos periódicos y por material no iba a quedar.
Sin embargo, analizando las portadas del día siguiente, bien pudiera decirse que las informaciones que nos facilitaron los medios eran erróneas. ¿Por qué? Porque la inmensa mayoría focalizaron su atención casi exclusivamente en las figuras del marinero Pablo Costas y su mujer, Silvia Albés, y en el abrazo que ambos se dieron.
Casualidad pensarán muchos. Posiblemente, sí, de no ser porque en los días previos (y eso sí que me llamó la atención), el promedio de apariciones de la señora Albés en las fotografías que acompañaban las distintas informaciones era muy superior a la de buena parte del resto de familiares.
Lógicamente, desconozco el motivo exacto, pero me temo que la atención de los medios se centró en esta pareja por la buena imagen que ambos daban. No hay que negarlo; tienen buena presencia, son jóvenes y además se quieren. La perfecta historia de amor.
Es más que probable que el resto de mujeres, madres, padres, hermanas y hermanos, etc; quisieran tanto o más a sus respectivos marineros secuestrados durante un mes y medio. Sin embargo, la tiranía de la imagen parece que se impuso una vez más y los medios apostaron por un reencuentro en concreto en detrimento del resto.

PD: Releyendo lo escrito me he dado cuenta de que dije: “pero hoy voy a abordar la cuestión desde un punto de vista muy distinto”. Puedo prometer y prometo que no iba con ironía aunque la verdad es que viene ni que pintado jeje.

sábado, 21 de noviembre de 2009

Para hacérselo mirar


Rememorando viejos tiempos, no he podido evitar echar mano de las estadísticas de nuevo. Antes, cuando aún existía la ya tan lejana Tribuna de Guadalajara, me sirvieron para sacar petróleo (en forma de reportajes y páginas) en esos días en los que nada ocurría; ahora, recurro nuevamente a ellas para confirmar lo que muchos ya sabéis: mi frikismo absoluto.
Porque hay que ser friki para, tras ver el Cartagena-Gestesa que grabé anoche, entrar en la web de la LNFS para confirmar una sensación y descubrir otra curiosidad.
La sensación intuida con acierto es que los chicos de Andreu Plaza juegan partidos de 35 minutos en vez de 40 con excesiva frecuencia. Me explico. En seis de los diez partidos jugados hasta la fecha han encajado algún gol en los primeros cinco minutos del primer o segundo tiempo (Pinto, Benicarló, Zaragoza, Carnicer, Lugo, Playas y Cartagena). De hecho, si extendemos un minuto más el abanico, las cifras son aún peores ya que ante Azkar y Cartagena, los morados ya habían encajado dos goles en el minuto seis de juego.
Por el contrario, sólo Marcelinho, la semana pasado contra el Playas, marcó mientras los aficionados aún se estaban acomodando en sus asientos (eso sí, fue con una suerte tremenda porque un defensor despistó al meta castellonense).
Lógicamente este dato se traduce en que en siete de las diez jornadas celebradas la Unión Deportiva ha empezado por debajo en el marcador (sólo contra ElPozo, Marfil y Playas golpearon primero los de Andreu).
Pese a todo, el Gestesa aún puede soñar con la Copa y, de forma mucho más realista a mi modo de ver, disfrutar de un curso plácido en lo deportivo (Pinto y Benicarló parecen no levantar cabeza aunque hoy se enfrentan y las probabilidades apuntan hacia la victoria de uno u otro). ¿El plano económico? Lo desconozco aunque, conociendo los antecedentes y la situación de crisis actual, lo temo.

Si lo del Gestesa es para hacérselo mirar, lo de ayer del Rayet de baloncesto fue de juzgado de guardia. Con lo feliz que me fui yo hace algunas semanas del San José... Con un equipo que daba espectáculo y un americano (Justin Howard) imparable bajo el aro contrario. Ayer, por el contrario, fue de vergüenza, con una defensa pésima y una falta de intensidad alarmante.
Como muestra, una acción: Un onubense fuerza un tiro libre adicional. Nada fuera de lo común de no ser porque los árbitros indicaron que lanzará, éste lo hizo, falló y cogió su propio rebote porque... ¡el único jugador del Rayet que había acudido a por el posible rebote, estaba mirando para otro lado! Lógicamente, el 2+1 terminó siendo un 2+2. Y eso fue sólo un ejemplo.
Puede que los morados no sean ni tan buenos como me pareció entonces, ni tan malos como ahora, pero o cambian las cosas o el graderío va a estar cada vez más vacío (que ayer, todos los que vistieran algo morado entraban gratis y aún así apenas había 400 espectadores y siendo generosos).


PD: Volviendo al Gestesa, ayer vimos una circunstancia totalmente anómala: los dos equipos con el portero-jugador en pista al mismo tiempo. Yo sólo lo había visto antes en una ocasión, en un Guadalajara-Carnicer. Eso sí, aquel encuentro fue aún más esperpéntico ya que finalizó con el lanzamiento de una chaqueta a la pista desde la grada para ¡frenar un lanzamiento de Purao que podía haber significado el empate! Y a fe que lo logró. Ayer, no hubo chaquetas de por medio, pero al menos sirvió para alegrar un tanto una segunda parte tediosa.

viernes, 20 de noviembre de 2009

G busca pareja estable


Desconcertada y atónita, G ya no sabe quien le acompañará durante los próximos años. Tan acostumbrada como estaba a su queridos Siete, no torció el gesto cuando le hablaron de ampliar miras. Siguiendo la más pura filosofía 'Ikeista' (ya saben, donde caben dos caben tres...) se dejó ver con Ocho.
Sin embargo, su belleza y su poder eran irresistibles para muchos. Así, conoció nuevos amores y también algunos amantes. G, obnubilada, se dejó llevar por los consejos de los que la acompañaban. Así, entró de lleno en el mundo del desenfreno y la orgía. Primero 14; después, 20.
Y de pronto, casi sin darse cuenta; aquellos que le marcaban su camino cambiaron el curso de sus pensamientos y redujeron el espectro casi a la mínima expresión. Sólo Dos. O quizás ni eso.
Para los que todavía no hayan caído en la cuenta, les hablo nuestra amiga G, la que acompaña a las reuniones de los países más poderosos del planeta. Reuniones que arrancaron (según datos recogidos en Wikipedia), en marzo de 1973 cuando, a petición del Secretario de Tesoro estadounidense, George Shultz, se reunieron los ministros de finanzas de Estados Unidos, Japón, Alemania Occidental, Francia y el Reino Unido. En la cumbre de 1975, en Rambouillet, Francia, se produjo la entrada de Italia y, dos años más tarde, en 1977, en la cumbre de San Juan, Puerto Rico, se unió a ellos Canadá.
A finales de los 90 se incorporó Rusia (antes lo había hecho la nueva Alemania ya reunificada) y una década más tarde arrancaron las primeras citas a 20 bandas en las que se veían las caras siete países más industrializados más Rusia, 11 países recientemente industrializados de todas las regiones del mundo, y la Unión Europea como bloque.
El pasado mes de septiembre, con motivo de la cumbre de Pittsburg se decidió que el G-20 reemplazaría al G-8. No obstante, la alegría duró poco ya que, con motivo de la histórica visita de Obama a China (es el primer presidente estadounidense que visita el país asiático en su primer año de mandato), muchos son los analistas que hablan de un G-2. Es decir, el regreso a un mundo bipolar, pero desplazado hacia Asia y el Pacífico.
Sin embargo, todos ellos y con ellos también parece que el propio Obama que no había cesado de lanzar esa idea, mudaron el rostro al oír las palabras del primer ministro chino Wen Jiabao quien advirtió al mandatario americano que su país no tiene ningún interés en participar en un G-2 que resuelva los grandes problemas mundiales y abogó por la multilateralidad y por las Naciones Unidas como el foro internacional donde deben resolverse todos los problemas internacionales.
Un gesto que le honra pensarán muchos. Otros, por el contrario, mantienen que Pekín prefiere mantenerse en un discreto segundo plano que le permita seguir creciendo de forma imparable, sin tener que asumir responsabilidades indigestas como, por ejemplo, apretar las tuercas al régimen iraní, una fuente vital de energía para los chinos.
Así las cosas, pese al entusiasmo de la Casa Blanca por ese G-2 y una vez despreciado el G-20 a través de sus comunicados; G busca pareja estable.

miércoles, 18 de noviembre de 2009

¿Por qué lo llaman cumbre?


Antes de entrar en materia, déjenme presentarles hipotéticas situaciones.

Situación A: Un grupo de colegas se desplaza a la residencia de uno de ellos para una de sus habituales encuentros. Como siempre, visten de acuerdo a las costumbres del anfitrión. Una costumbre que se trasforma en un trastorno para muchos cuando el hospedador de la próxima fiesta anuncia que para entonces deberán vestir falda.

Situación B: Nueva reunión, en este caso en un país relativamente lejano. Aprovechando las horas libres, uno de los asistentes, monta una fiesta a la que invita (les pagó 50 euros por cabeza), a 200 mujeres. Eso sí, para entrar deben tener entre 18 y 35 años y medir más de 1,70.

Situación C: Una empresa importante, hace un llamamiento urgente para resolver un tema de vital importancia. Pese al dramatismo de la llamada, los peces gordos de dicha compañía hacen oídos sordos a la cita y mandan a sus subalternos. Todos menos uno. Un ejecutivo responsable, pensarán. No crean. Acude simplemente porque así evitar dar la cara ante sus padres que iban a exigirle cuentas por los desfalcos cometidos durante años en el hogar.

Situación D: Un país importante tiene que elegir a sus principales cargos. Pero, ¡oh, sorpresa!. Lejos de procederse a las naturales elecciones democráticas, un grupo de elegidos se reúne una noche a cenar para elegir a dedo y sin ningún tipo de consultas con el pueblo a los nuevos rectores de dicho país. Para colmo, cada uno de los asistentes a dicho ágape, acude con sus particulares candidatos y lanzando proclamas como la siguiente: “Necesitamos a alguien que pueda parar el tráfico en cualquier capital europea” con motivo de una visita a dicha ciudad.

Tras esta introducción y parodiando a una profesora que estos días me da clases (es sólo una forma de hablar, claro), permítanme que utilice yo también el diccionario de la lengua española para definir el término cumbre en su acepción tercera que es la que más nos interesa.
Cumbre: Reunión de máximos dignatarios nacionales o internacionales para tratar asuntos de especial importancia.
Pues bien, recuerdan el caso A. En realidad hablaba de la cumbre de países que participan en la asamblea de la Asociación Asia-Pacífico (APEC), que suman más del 50% del PIB mundial y que parecían más estresados por el hecho de que la próxima cita tendrá lugar en Hawai (con las correspondientes faldas para posar en la foto de turno) que por arreglar el desaguisado económico internacional.
La situación B hace referencia a Muammar el Gaddafi, mandatario libio, que aprovechando la cumbre mundial sobre la seguridad alimentaria de la FAO que estos días se celebró en Roma, montó una fiesta particular aunque, según las informaciones se trató de “una especie de catequesis islámica en un par de horas” con entrega de un Corán de regalo. El propósito, convencerlas para que se convirtieran al islam. La pregunta es: ¿acaso Gaddafi no quiere convertir a los hombres o a las mujeres más pequeñitas?
Para la situación C seguimos en Roma, en esa cumbre de la FAO que, pese a las palabras del secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, anunciando que en un día mueren 17.000 niños en el mundo; no contó con la presencia de los jefes de Estado de los países occidentales, excepto Silvio Berlusconi. El mandatario italiano no acudió por ser el anfitrión ni por compromiso político, sino para eludir un juicio en Milán en su contra que se celebraba en esas mismas fechas y para el que solicitó aplazamiento a coincidir con la cumbre)
Por último y quizás una de las más llamativas, la situación D hace referencia a la cumbre-cena que protagonizarán mañana jueves los dirigentes de los países que conforman la UE con el propósito de elegir al primer presidente del Consejo de la Unión Europea y al primer ministro de Asuntos Exteriores.
Un asunto de enorme trascendencia que, como bien denunciaba Lluís Bassets en su blog, es un ejemplo antidemocrático ante el mundo ya que, en lugar de dar la oportunidad al pueblo para decidir lo hará “el colegio electoral más pequeño del mundo (...) Son 27 los electores, no se sabe quiénes son los candidatos y apenas quiénes pueden serlo, no hay ni puede haber campaña ni debate alguno, y todo se resolverá en una zaragata de reunión a puerta cerrada de la que con suerte se filtrarán algunos detalles a la prensa. Y por cierto, tampoco se sabe exactamente cuáles son las competencias de los puestos que hay que ocupar”.
Visto lo visto, ¿por qué lo llamarán cumbre cuando quieren decir otra cosa?

lunes, 16 de noviembre de 2009

El fútbol y el interés general, entonces y ahora


Los fanáticos del fútbol ya lo saben. Los que no, lo intuyen y, según se acerque la fecha, se enterarán también. Es inevitable. El día 29 de noviembre se para el mundo con el partido del siglo (del siglo 432 cuando menos de tantos partidos semejantes que hemos anunciado los periodistas). Barcelona-Real Madrid.
¿Lo veremos todos? Pues no y no porque muchos, hartos de tanto fútbol, rehuyan el choque, sino porque muchos, salvo que acudan a los bares, no podrán disfrutar (o sufrir, que vaya usted a saber cuán inspirados estarán las 'estrellas') del clásico de nuestro fútbol. El motivo no es otro el dichoso pago por visión, aquella denominación que removió los cimientos de la política años atrás en defensa del interés general y que quedó, más o menos, en nada.
Pues bien, buceando por las hemerotecas (ya sabéis que soy friki) me encontré con este titular en EL PAÍS del 17 de noviembre...de 1979: "Se aplicará un decreto de 1959 para televisar el Sporting de Gijón-Real Madrid".
Una noticia que provocó las iras de los clubes, que amenazaban con huelgas y todo. Se ve que los tiempos no cambian y que las entidades deportivas se remueven en cuanto algo no les satisface. O mejor dicho, sí y mucho. Primero porque ya nadie se sorprende por el hecho de que el clásico no se retransmita en abierto y, segundo, porque entonces, hace 30 años, los galácticos procedían de tierras asturianas y entre los contendientes aparecía una Real Sociedad que ahora lucha por retornar a la élite. ¿El Barcelona? Por aquel entonces era séptimo, por detrás de Salamanca, Español y Las Palmas. Casi como ahora mismito jeje.

PD: Cómo podéis ver en la imagen que acompaña esta entrada, al final la contienda terminó en tablas. ¿Qué ocurrirá con el clásico de este año?

domingo, 15 de noviembre de 2009

Ya no es lo que era


Será que me estoy haciendo viejo, será que hay cosas más importantes en las que pensar, o será, que sin negar por completo las dos impresiones previas, ese pensamiento que anida en mi cabeza es cierto. ¿Qué pensamiento? Que el fútbol sala ya no es lo que era.
No es que los primeros fríos de la temporada me hayan generado estas ideas. Es algo que ya lo pensaba desde hace bastante tiempo, pero que ayer resurgió al regresar una tarde de sábado al polideportivo Municipal David Santamaría, cita inexcusable en el pasado y ahora, los tiempos cambian, ocasional.
Y allí andaba el Gestesa Guadalajara y el Playas de Castellón luchando por tres puntos para soñar con la Copa. ¡Qué extraño! Los alcarreños soñando por citas coperas cuando siempre han sido un club humilde que bastante tiene con sobrevivir y sacar dinero para llegar a fin de mes (aunque el mismo no aparezca en el bolsillo de sus destinatarios hasta mucho tiempo después con demasiada frecuencia).
Pero aún más sorprendente, el Playas, ese equipo que cuando el siglo XXI daba sus primeros pasos lo ganaba todo, pena por la clasificación y queda por detrás de un equipo cuyos nombres más ritulantes son Charlie, Miñambres y Carlos Anós con todo mi respeto para estos buenos jugadores.
Claro que es que en los levantinos, quitando a su portero Rafa, el panorama era desolador. Muchas caras jóvenes por cocer y otros más bien pasaditos.
Pero así está este deporte, de capa caída, encomendándose a jóvenes canteranos y promesas porque no hay dinero tras años de despilfarro sin sentido.
La buena noticia es que la afición sigue respondiendo en idéntica medida (exceptuando los llenazos de los play off de ascenso y permanencia).
A falta de renombre y estrellas, mandan los resultados y ahí los morados van con relativa suficiencia en el presente curso.

PD: Por primera vez en la historia, los levantinos se fueron de vacío del David Santamaría (3-1). Lo dicho, este deporte ya no es lo que era. Y no digo que sean malos los cambios, pero creo que o alguien cambia esto o el fútbol sala va a ir aún más para abajo por mucho que la selección y tres equipos de postín ofrezcan un gran cártel internacional.

jueves, 12 de noviembre de 2009

El Alakrana y lo políticamente correcto


Antes de nada, subrayar que es muy fácil hablar cuando la tragedia que viven numerosas familias es ajena por completo a mi persona.
Sin embargo y no se molesten, no dejo de sorprenderme al oír buena parte de los discursos y opiniones sobre la crisis del Alakrana. Casi todas, reman en una misma dirección: devolver por lo civil o lo criminal a los piratas apresados hace ya algunas semanas a Somalia para, así, acelerar el rescate de los atuneros gallegos y vascos.
Con menor brío, pero de forma clara, también se habla de efectuar el correspondiente pago por su liberación. Una vez cumplidas ambas, premisas, la pesadilla habrá terminado.
¿Seguro? ¿Alguien puede garantizar que esos mismos piratas, con medios y armamento más sofisticado (lo normal es que inviertan parte del dinero del rescate en mejorar su arsenal y sus equipos de asalto y piratería además de en otros placeres) y con sus colegas encerrados en alguna cárcel de un estado fallido (y por tanto, con enormes opciones de salir de ella rápidamente) no aborden otro barco dentro de poco?
Es lógico que el Estado vele por la integridad de sus ciudadanos y que se deje la piel en la tarea. Sin embargo, acceder a las peticiones de los piratas no parece la forma más segura de acabar con un problema que se puede enquistar aún más en el tiempo.
Así las cosas, la opción podría ser la militar, aunque lógicamente implica un enorme riesgo para los marineros y para todos aquellos que tomasen parte en él. Si algo saliese mal, la responsabilidad sería del Gobierno de turno, obviando que el barco se encontraba fuera de la zona protegida por las fuerzas internacionales porque así lo estimó el armador o patrón correspondiente desoyendo los consejos de las autoridades.
Precisamente por ese riesgo, casi nadie quiere abrir esa puerta. Un alivio para todas las familias de los pescadores y de los militares desplazados en la zona y que pondrían su vida en juego.
Sin embargo, al cerrar esa puerta, se entorna un tanto la puerta del derecho y la legalidad y, sobre todo, se deja vía libre a unos piratas que reafirman su fe y comprueban que ese es el camino, un camino arriesgado pero con final feliz en la mayoría de oportunidades.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Los otros muros


Un día como hoy, vale la pena recordar que existen otros muros en pie a lo largo de nuestro planeta. Para ello, me hago eco de un artículo titulado LOS OTROS MUROS de Marta Del Vado publicado en la revista Foreign Policy.
Ahi os dejo el texto íntegro de todas formas:

LOS OTROS MUROS
Marta Del Vado

Hace 20 años cayó el Muro de Berlín. El mundo pensó que sería el último, pero desde entonces se han levantado otros muchos. FP Edición española ha seleccionado tres de los más significativos y ha preguntado a expertos de ambos lados por su visión de estas fronteras artificiales.
La caída del muro de Berlín supuso un antes y un después en las relaciones internacionales a finales del siglo XX. Un hito histórico que todavía hoy, dos décadas después, se conmemora como el reflejo de la concordia. Fue el símbolo del derrumbe de 30 años de separación, de diferencias, de odio cultivado. Pareció ser el punto y final de una política –o de la ausencia de ella– que daba paso a la diplomacia internacional como herramienta estrella para la resolución de conflictos. Pero ahora, con la perspectiva que da echar la vista atrás, su caída no fue más que el principio; el punto y seguido de una larga lista de muros que están en pie, y que crecen, en pleno siglo XXI.
Son barreras kilométricas de hormigón, acero y alambradas de espino creadas por los gobiernos para hacer frente a conflictos latentes. Algunas vienen arrastrando su existencia desde hace décadas, como la que divide las dos Coreas, o las que separan el Sáhara Occidental, Belfast o la isla de Chipre. La mayoría, sin embargo, han sido levantadas en la era post Berlín, como es el caso del muro entre Estados Unidos y México, el de Israel en Cisjordania, las vallas de Ceuta y Melilla, los muros que separan a las distintas comunidades en Bagdad, el de Arabia Saudí y Yemen, o el que aísla las favelas de Río de Janeiro. Las razones por las que se han construido varían. Las secuelas que dejan tienen rostros, nombres y lugares diferentes. Pero todas estas fronteras artificiales, según el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, comparten una misma consecuencia: vulneran el derecho internacional, de manera directa o indirecta.
La inmigración ilegal es uno de los grandes problemas de la nueva centuria. Algunos gobiernos se han visto incapaces de crear políticas migratorias efectivas que detengan o eviten auténticas avalanchas humanas hacia regiones más prósperas. Países como España, Estados Unidos o China han encontrado soluciones a este fenómeno levantando vallas en la frontera marroquí de Ceuta y Melilla, un muro a lo largo de la frontera con México o con Corea del Norte. Todos, por cierto, construidos durante los últimos doce años.
La lucha contra el terrorismo es otra de las grandes justificaciones para la existencia de estas fronteras de hormigón. Es el caso de Israel que, en 2002, empezó a levantar una barrera de más de setecientos kilómetros alegando razones de seguridad, para evitar ataques terroristas de extremistas islámicos. Hoy en día sigue en pie a pesar de que, en 2004, el Tribunal Internacional de Justicia de La Haya dictaminara el derribo del muro, construido en un 85% en territorio palestino. No es una solución aislada, sino una tendencia creciente. Este mismo verano, Pakistán ha hecho pública su intención de construir un muro en su frontera con Afganistán para evitar el movimiento de la insurgencia talibán y el contrabando por la zona noreste del país.
El narcotráfico es otra de las razones que alegan los Ejecutivos para defender estas barreras. Es el caso de Estados Unidos o de Irán. Para detener el flujo ilegal de drogas, Teherán puso en marcha, en 2007, un proyecto para tapiar su frontera con Pakistán con 700 kilómetros de cemento y acero. Los conflictos territoriales son otro gran argumento para la persistencia de estas barreras. La más antigua, la que dibujan miles de soldados en el paralelo 38, en la frontera entre las dos Coreas. Lleva en pie desde 1953 y representa una solución de paz para dos países que, técnicamente, continúan en guerra. Chipre es un país dividido de norte a sur: 300 kilómetros de hormigón pasan por el corazón de Nicosia desde 1974, separando a las comunidades griega y turca. Bajo este argumento se mantiene también el muro de Marruecos en el Sáhara Occidental, uno de los más largos del planeta. Una barrera militarizada, de más de 2.500 kilómetros de longitud, bordeada por vallas de espino e inundada por millones de minas antipersona desde 1987.
Estas paredes se han levantado también para evitar conflictos internos. Es el caso de la ciudad de Belfast, por la que, todavía hoy, cruzan los muros que dividen a católicos de protestantes para evitar actos terroristas entre ellos. O de Bagdad, una ciudad completamente amurallada desde 2007 como estrategia de seguridad de Estados Unidos para impedir ataques sectarios.
A esta retahíla de argumentos para la construcción de estas barreras se suma uno medioambiental, la de frenar la deforestación que alegó el Gobierno del Estado de Río de Janeiro para empezar a construir, a finales de 2008, un muro que impide la expansión de las favelas a las zonas más ricas de la ciudad.
Las consecuencias de la existencia de estos muros son múltiples, pero tienen un denominador común: recaen siempre sobre la población civil. Prohíben el libre tránsito de las personas, aíslan a poblaciones enteras, separan a familias, obligan a los inmigrantes a buscar rutas más arriesgadas de tránsito, segregan, discriminan y fomentan el odio entre comunidades o naciones.
Hoy, 20 años después, los muros de Berlín se han multiplicado por todo el planeta. Todos diferentes en sus raíces y causas, pero todos son la materialización de un fracaso. O de varios. Fracaso de políticas migratorias. Fracaso de políticas sociales y laborales. Fracaso en materia de seguridad y defensa. Fracaso en la capacidad de negociación, de diálogo, de acuerdo, fracaso de cooperación. En definitiva, fracaso de los gobernantes, que han encontrado en estos muros la solución física para los conflictos que son incapaces de solventar por la vía de la diplomacia.

EE UU-MÉXICO

UNA SOLUCIÓN SIMPLISTA
Estados Unidos resolvió en 2006 completar un gigantesco muro en su frontera sur para reducir el número de indocumentados que ingresan en su territorio. Quizá lo hizo ignorando que, al igual que otras murallas, ésta representa una solución simplista condenada a caer en los vicios alertados por la comunidad internacional.
La violación de los derechos humanos es su efecto más visible. Ante la incapacidad de cualquier muro de frenar el deseo del hombre por buscar una vida mejor, los cruces continúan pero con un riesgo mucho mayor, pues ahora se producen en zonas más inhóspitas y peligrosas del desierto. Los más afortunados logran atravesar la frontera tras varios días de insufribles precariedades, mientras que a otros simplemente no les alcanzan las fuerzas. Aunque resulta imposible tener cifras exactas, el número de fallecimientos se ha multiplicado desde 1994, cuando arrancó la construcción de los primeros tramos del muro. Cálculos conservadores de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México señalan que más de 5.000 personas han muerto desde entonces; una cantidad mucho mayor a la provocada durante 28 años por otro muro, el de Berlín, que con tanto ahínco EE UU luchó por derribar.
Pero esto no es todo. El mayor riesgo conlleva la necesidad de mecanismos cada vez más sofisticados y onerosos para realizar las incursiones, lo que se ha traducido en el incremento exponencial de las sumas que quienes buscan el sueño americano deben pagar a los coyotes y la construcción de túneles de toda longitud y diámetro. El precio por cruzar puede superar con facilidad los 3.000 dólares.
Así, la muralla propicia el lucro de una mafia multimillonaria que utiliza su infraestructura subterránea no sólo para el tráfico ilegal de personas, sino también de sustancias prohibidas y armas.
A pesar de que los datos más recientes del Pew Hispanic Center reflejan un descenso en el flujo de irregulares, es difícil atribuir este resultado al muro cuando factores como la crisis económica también sirven como inhibidor. Sin embargo, aun en el supuesto de que el muro esté cumpliendo parcialmente su objetivo, es necesario plantear si aquello merece el sufrimiento y las muertes que está provocando, por no mencionar el crecimiento de organizaciones delictivas capaces de atentar contra la seguridad nacional, bajo cuya justificación –paradójicamente– se motivó la construcción de esta enorme pared.
Este muro no es el antídoto para mitigar la inmigración ilegal. La única solución real es una reforma migratoria integral. Esta política facilitaría a EE UU un mayor control de su frontera. Por supuesto, México debe también hacer su parte, reforzando su vigilancia fronteriza y emprendiendo reformas estructurales fundamentales para generar empleo de calidad en su territorio. Sólo así evitará el coste socioeconómico que genera la fuga de valioso capital humano.
Mauricio Rodas Espinel es director general de la Fundación Ethos de México
NECESIDAD POLÍTICA
Si las fronteras son cicatrices de la historia, el muro que se está construyendo entre México y Estados Unidos es como un torniquete que se le aplica a una herida abierta, en un desierto donde la historia aún no se ha resuelto.
La frontera norteamericana, por más dramáticos que sean los contrastes entre los dos lados de sus más de 3.000 kilómetros, no representa un frente bélico. No es la línea divisora en Corea ni el muro de Israel ni el de Berlín de otros tiempos. La superpotencia estadounidense ni siquiera tiene que movilizar tropas para protegerla.
Es una cuestión de simbolismo político, no de seguridad. Pero lo más curioso es que en Estados Unidos el muro fronterizo no representa un rechazo a una reforma liberal migratoria. Al contrario: debe considerarse como el precio a pagar por tal reforma. El esfuerzo arrancó en 2006, cuando el fallecido senador Edward Kennedy y el republicano John McCain propusieron al Congreso una ley de amnistía (sin llamarla así) a los millones de indocumentados que se encontraban ya en el país, pero fue derrotada, y el esfuerzo lanzado al mismo tiempo para fortalecer el cumplimiento de las leyes migratorias ha seguido adelante.
Barack Obama entró en la Casa Blanca prometiendo seguir la línea McCain-Kennedy. Sin embargo, el muro sigue construyéndose, y las deportaciones han continuado. No es por inercia. El cálculo político es que el público estadounidense no apoyará reforma alguna hasta que sienta que el Gobierno está fortaleciendo la frontera y el Estado de Derecho.
A mediados de los 80 hubo una amnistía para tres millones de indocumentados (ahora serían 12 millones). La legalización, entonces, de inmigrantes irregulares fue acompañada por el compromiso de hacer respetar la ley y controlar el flujo. La Administración no cumplió su parte y el Congreso no autorizó la suficiente inmigración legal durante las últimas dos décadas, lo que derivó en la importación de más mano de obra indocumentada que antes. Y ahora, el Ejecutivo no tiene credibilidad al decir que se trata de la última regularización.
Con la recesión actual, el número de mexicanos que ha emigrado a Estados Unidos ha caído considerablemente (en torno a un 30% o 40%), al igual que el flujo de las remesas. Cada año regresan a México más de 450.000 personas, pero esta cifra no se ha disparado con la crisis. ¿La razón? Con la construcción del muro y el aumento de los guardias fronterizos, el cruce resulta más costoso y difícil, por lo que muchos mexicanos se lo piensan dos veces antes de volver. Es decir, la circularidad de la migración entre los países se ve interrumpida, atrapando a los mexicanos al norte, no al sur de la frontera.
El muro, después de todo, es una necesidad política, divorciada de la realidad económica o de lo que requiera la seguridad nacional.
Andrés Martínez es director del Programa Bernard L. Schwartz Fellows de la New America Foundation (EE UU).


CEUTA/MELILLA-MARRUECOS

BUENA VECINDAD
La valla no representa tanto la diferencia entre Melilla y la vecina provincia marroquí de Nador como la desigualdad entre la rica Europa (unos 25.000 euros de renta per cápita) y el África subsahariana (menos de 550 euros). No es casualidad que su construcción se inicie a finales de los 90, tras la entrada en vigor del Acuerdo de Schengen. La valla es la respuesta española a las exigencias europeas sobre el control de las fronteras exteriores.
El PIB de España es casi 20 veces el de Marruecos. Con la excepción de las dos Coreas es la diferencia de renta más alta entre países vecinos. Sin embargo, esta frontera no es una línea de guerra, sino que materializa una oportunidad de enlace. Mientras que la valla simboliza la separación del exterior, la frontera es sinónimo de paso. Así lo demuestran cada día las más 20.000 personas que la cruzan a ambos lados a través de varios puestos fronterizos.
La entrada de España en la UE en 1986 ha hecho olvidar a los españoles lo típico que era pasar a Francia. Siempre había oportunidades que no se encontraban en su país, y con mejores condiciones y precios. Treinta años después, el Mercado Único y Schengen han diluido estas diferencias.
Para los marroquíes, Melilla no deja de ser un pedazo de la UE con muchas oportunidades de empleo, educación, comercio y atención sanitaria. De hecho, cerca de 2.500 nadorenses tienen contratos de trabajo en esta ciudad y atraviesan diariamente la frontera para ir a trabajar.
Aunque tradicionalmente Melilla (y Ceuta) generan tensiones en las relaciones oficiales entre Madrid y Rabat, para melillenses y nadorenses, ajenos a la alta política, la convivencia ofrece numerosas oportunidades. De hecho, pese a sus nobles propósitos, la Política Europea de Vecindad de la UE no ha conseguido aún materializar proyectos en una frontera en la que la vecindad –con minúscula– funciona día a día. Esto es algo que no debería desaprovecharse.
José María López Bueno es presidente de la Sociedad Pública para la Promoción Económica de Melilla
EL MIEDO AL OTRO
La política europea que ha impulsado la construcción de estos muros de Ceuta y Melilla simboliza el repliegue identitario que causa estragos no sólo en Europa sino en todo el mundo desde hace casi dos decenios.
¿Representan estos cercados de hierro de 20 kilómetros de largo y seis metros de alto el deseo de retorno al origen del Viejo Continente? De hecho, la mitología griega, fuente fundamental de la identidad europea, se refiere a las columnas de Hércules o, dicho de otra forma, a Gibraltar en Europa y el monte Abyla en África, como la separación entre el mundo civilizado y el de los salvajes. Existe la tentación de pensar en el resurgir de ese miedo ancestral cuando se oyen las declaraciones del ministro alemán del Interior, Wolfgang Schäuble, felicitándose”, en abril de 2007, de que “los ciudadanos [europeos] esperan que la Unión Europea les asegure una protección eficaz de sus fronteras exteriores”. De hecho, la Unión acababa de aprobar la creación de la fuerza de intervención, compuesta de 116 buques, una treintena de helicópteros y más de veinte aviones, además de varias centenas de policías de frontera. Así como toda una panoplia de equipamientos de vigilancia, radares y cámaras ultrasofisticadas para controlar las fronteras marítimas del sur de Europa. Estos dos muros, coronados de alambre de espino y con un sistema de detección de ruido y movimiento, fueron la primera gran construcción del presente milenio financiada con fondos de la Unión Europea en el continente africano.
Con esto, además de las barreras jurídicas que se instalaron en Europa contra la inmigración hace unos años, se suman las barricadas físicas móviles (Frontex) o fijas (los muros de los dos enclaves). Los graves incidentes ocurridos en 2005, cuando murieron varios inmigrantes en la frontera, recordaron el tristemente célebre death-strip (franja de la muerte) del muro de Berlín. Este triste episodio provocó, por una parte, un exceso de mediatización de los inmigrantes subsaharianos en Marruecos y en el Magreb, que generó más xenofobia y agresividad, traducidas en ataques, delaciones y sospechas por parte de los autóctonos; y por otra, la búsqueda de una nueva vía de acceso al territorio europeo, aún más peligrosa, a través del archipiélago canario. El resultado, según algunas estimaciones españolas de 2006, fue que 6.000 inmigrantes murieron al intentar alcanzar Canarias en embarcaciones precarias.
Otro resultado, inesperado, de los muros de Ceuta y Melilla fue la excitación del deseo de alcanzar Europa costara lo que costara. Lo sabemos bien y desde siempre: ¡lo prohibido sabe mejor! No en vano, habría que recordar que hasta comienzos de los 90 muchos países europeos no habían establecido todavía ni muros ni visados y, sin embargo, Europa no fue invadida por nadie.
Maâti Monjib, profesor de la Universidad de Rabat, es Patkin Fellow en la Brookings Institution, Washington DC, EE UU.


ISRAEL-CISJORDANIA

JAULA PARA LA ESPERANZA
En 2004, el Tribunal Internacional de Justicia de La Haya determinó que el muro israelí es ilegal según el derecho internacional, y que Tel Aviv debería parar su construcción, desmantelar lo construido y ofrecer compensaciones por lo destruido. Además, estipulaba que es parte del asentamiento ilegal de Israel en los territorios ocupados, que también debía detenerse. Después, la Asamblea General de la ONU aprobó la resolución ES-10/15, que apelaba a Israel a cumplir el dictamen del Alto Tribunal.
Al contrario de lo que muchos creen, el muro no se ha construido en el lado israelí de la Línea Verde, la división reconocida internacionalmente como separación entre Israel y los territorios palestinos ocupados. Cuando esté terminado, recorrerá 720 kilómetros, de los que un 82% estará en tierra palestina ocupada. El muro penetra 22 kilómetros en Cisjordania, y un 10% de la población palestina, sobre todo quienes viven en Jerusalén Este, se encontrarán atrapados entre la Línea Verde y el muro.
El trazado se hizo de tal modo que abarcara tanta tierra como fuera posible del lado Oeste y al mismo tiempo asfixiara a las poblaciones palestinas al Este. El resultado es el aislamiento y la creación de guetos. Los granjeros palestinos no pueden acceder a sus tierras, con lo que las cosechas se pierden. Los olivos han sido arrancados y destruidos. Los hombres y las mujeres no pueden llegar a sus trabajos ni los estudiantes a sus escuelas. Los palestinos no tienen control sobre sus tierras o sus propiedades.
En 2007, se demolieron unas 165 casas y se arrasaron numerosas tierras de cultivo, la mayor parte en Jerusalén y sus alrededores. Está previsto construir carreteras y túneles que permitan a los israelíes conectar sus asentamientos sin tener que atravesar pueblos palestinos o rodear todo el muro. Hay 17 pasos alrededor de Jerusalén y sólo tres para los cisjordanos. También hay 63 puestos de control y accesos israelíes a lo largo del muro, pero no en todos se permite pasar a los palestinos y la mayoría abre sólo durante unas horas. Para acceder a Jerusalén o cualquier otro lugar de Israel, un palestino necesita un visado israelí. Esta táctica previene la libertad de movimientos de los palestinos entre Jerusalén Este, el resto de Palestina y Cisjordania.
Este muro no sólo hace imposible la idea de alcanzar un Estado palestino viable, sino que también hace imposible imaginar qué tipo de sociedad puede surgir de semejante opresión. El pueblo palestino vive en una jaula de esperanza perdida. Su mente ha sido moldeada por la ocupación, la destrucción, el abandono, la humillación, la deshumanización y la pérdida absoluta de cualquier control sobre sus vidas.
Ghassan Khatib ha sido ministro del Gobierno de la Autoridad Nacional Palestina. Este artículo ha sido escrito en colaboración con Alia Amat
SALVAR VIDAS
En 2002, los atentados terroristas suicidas palestinos en las calles, centros comerciales, guarderías y autobuses israelíes llegaron a tal punto que los ciudadanos tenían miedo de salir de sus casas, de mandar a sus hijos al colegio y de subir a un autobús. Ésa era la situación cuando el Gobierno israelí adoptó la decisión de construir un obstáculo físico entre los terroristas palestinos y sus víctimas.
Desde el inicio de su construcción, la valla de seguridad ha recibido muchas críticas. En algunos casos, por causas legítimas, y en muchos más, por razones políticas y propagandísticas. Sin embargo, ni tan siquiera todas las críticas pueden cambiar los hechos: las cifras. El número de atentados suicidas se ha reducido un 95%, y el número de víctimas ha descendido un 98%. Los datos muestran que la valla de seguridad no sólo es un instrumento legítimo de autodefensa, sino que también salva vidas.
De sus proyectados 720 kilómetros de longitud, el 95% está compuesto de alambradas y sensores electrónicos. Sólo un 5% del trazado es muro de hormigón. Por esta razón, está claro que la denominación más adecuada es la de valla, y no la de muro. Su ancho, de 40 metros, es similar al de una autovía de cuatro carriles, con un sistema de detección en su centro. Los tramos construidos en cemento están destinados no sólo a evitar la infiltración de terroristas, sino también a bloquear sus disparos contra los vehículos israelíes que viajan por las carreteras adyacentes.
Al contrario que otras vallas en otros lugares del mundo –que tiene como razón de ser evitar la inmigración de personas que buscan trabajo y una vida mejor–, el caso israelí es completamente diferente. Su único objetivo es proteger la vida de sus ciudadanos de los ataques terroristas. El día en el que cese el terrorismo, desaparecerá.
El Tribunal Supremo de Israel ha establecido que la construcción de la valla es conforme a las leyes internacionales, aunque en algunos casos obligó al Gobierno israelí a cambiar su trazado. Sus sentencias se han basado en buscar un equilibrio entre los perjuicios que causa la valla en la vida de los palestinos, por una parte, y el derecho a la vida de los israelíes, por otra.
A nadie le gusta vivir con barreras. A los israelíes tampoco. Esperamos que llegue el momento en el que la valla no sea necesaria y podamos vivir en paz con nuestros vecinos.
Lior Haiat es portavoz de la Embajada israelí en España

jueves, 5 de noviembre de 2009

Ojalá haya huelga


Permítanme que me tome la situación a cachondeo porque lo contrario puede ser peor.
Como saben, recientemente se revocó en el Congreso de los Diputados la llamada Ley Beckham, aquella que permitía que los extranjeros que ingresan más de 600.000 euros anuales cotizasen al IRPF un 24% y no el 43% como los españoles.
Una medida cuyo origen estribaba, según parece, en atraer a ‘cerebros’ de talla internacional a las empresas nacionales, pero que, como se aprecia en el calificativo con el que se la conoce popularmente, quedó en un chollo para buena parte de los clubes de fútbol de Primera División que podrían ahorrarse un buen pellizco al fichar galácticos varios. Y es que la mayoría de clubes negocian los salarios neto (el jugador o su representante piden una cantidad a cobrar limpia) y es el club el que se las ingenia para que la cantidad bruta sea la menor posible y es ahí donde entraban los beneficios de la Ley para los clubes.
Dicho de otra forma, gracias a esta Ley, los equipos podían ofrecer más que sus rivales europeos sin notarlo tanto en sus bolsillos.
Rápidamente, la Liga de Fútbol Profesional argumentó que la medida va en contra del propio Estado ya que, sin tantas estrellas (se supone que se dispersarán por otros países al no poder mantener esas ofertas tan suculentas en nuestro país), Hacienda terminará recaudando menos vía clubes al tener estos menos ingresos.
Asimismo, habló de huelga.
La pregunta es: ¿quién hace la huelga? Porque los jugadores que ya militan en nuestro país no se ven afectados por la anulación de esta Ley (sólo afectará a aquellos que se incorporen a partir del 1 de enero de 2010). ¿Vendrán Ribery, Cesc, Pato, etc desde sus hogares, altavoz en ristre, para clamar contra el Gobierno?
Además, si los Ronaldo, Messi, etc, se sometieran a los deseos de sus jefes (donde manda patrón, no manda marinero) y finalmente fueran a la huelga, se imaginan las pancartas y los lemas que podrían portar: “Exigimos justicia. No nos toquen el IRPF que tengo una familia, una casa y unos cuantos coches que mantener con sólo 13 millones de euros anuales” en caso de Cristiano.
Casi, casi, tengo ganas de que ocurra para verlo.


PD: Aunque lo peor puede ser que aún haya algún cazurro en el paro que esté en contra de la medida porque puede quedarse sin fútbol un fin de semana (si están en contra de la medida por argumentos lógicos, me parecerá estupendo que todo el mundo puede tener su opinión, pero por no ver un día a los galácticos... No me fastidies).

martes, 3 de noviembre de 2009

Mejor segundo que primero


Permítanme una pregunta: ¿prefieren ser primeros o segundos?
Tic, tac, tic, tac.
¿Lo han decidido ya? En caso de que hayan elegido ser segundos, quizás ustedes estén aspirando a ser el alto representante de la Unión Europea. En mi modesta opinión, son ustedes muy listos.
Me explico. Tras años de dimes y diretes, el próximo 1 de diciembre entrará en vigor el nuevo Tratado de Lisboa (aquel refrito de la Constitución Europea que barrancó años atrás). Un documento que introduce numerosas modificaciones y nuevos cargos. Los dos más importantes son el de presidente del Consejo y el de alto representante.
Para el primero, sonaba desde hace meses la candidatura de Tony Blair, el ex primer ministro británico, aficionado a ocupar cargos de relumbrón, si bien su estrella se ha difuminado en su actual ocupación en Oriente Medio (cierto es que no se pueden pedir milagros).
Afortunadamente, en los últimos días, su candidatura ha perdido fuelle. Digo afortunadamente porque sería contradictorio que el máximo dirigente de la UE procediera de un país euroescéptico que ni siquiera comparte la moneda común y que, para colmo, sembró la discordia en el continente (no fue el único) con su apoyo a la guerra de Irak.
El caso es que los socialistas europeos, los que deberían ser sus máximos valedores, le echaron un jarro de agua fría al anunciar su intención de colocar a un socialista como alto representante. Una decisión muy acertada ya que, aunque nominalmente, el presidente del Consejo está por encima, lo cierto es que el alto representante (vicepresidente a su vez), contará con un presupuesto y un amplio equipo tras él. Todo lo contrario que la figura, más decorativa que ejecutiva (al menos hasta que se demuestre lo contrario) del presidente.
Eso sí, según apuntan las informaciones, los británicos no se han cruzado de brazos y jugarán con la negativa recibida a su caballo ganador. Y es que, Gordon Brown, actual primero ministro y sucesor de Blair, les dirá que ya que no habéis aceptado a nuestro Tony, dejad que David Miliband (foto) ocupe la vicepresidencia. Así, todos contentos ya que el grupo popular tendría al jefe y los socialistas al segundo, un segundo con más poderes que su superior.

PD: El 1 de diciembre, como decía entra en vigor el Tratado de Lisboa, pero lo cierto es que desde mi punto de vista, dicho acuerdo, ha perdido credibilidad después de las mil y una concesiones para que todos lo aprobasen. Así, por ejemplo, Irlanda obtuvo mejoras puntuales para forzar el sí en el reciente referéndum mientras que en Reino Unido, Polonia y República Checa no entrara en vigor la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE. Todo con tal de que el texto saliera adelante. La pregunta es: ¿el fin justifica los medios en este caso? Y sobre todo, cómo vendemos luego a la sociedad que se crea el proyecto de Unión Europea, si es más bien un mecano construido a gusto del consumidor

lunes, 2 de noviembre de 2009

El camino a seguir


El pasado 22 de octubre, el coordinador general de Izquierda Unida, Cayo Lara, y la líder de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Rosa Díez, mantuvieron una reunión para impulsar la Ley de Reforma Electoral. Una ley que provoca, por ejemplo, que Izquierda Unida cuente con sólo dos diputados con casi un millón de votos, mientras otros partidos nacionalistas hasta quintuplican su representación con menor cifra de votos.
Según informaba el diario EL Mundo en la previa de dicha reunión, “el Consejo de Estado ya ha informado al Gobierno, en el sentido de que considera posible reformar la Ley Electoral, y ha acogido gran parte de las propuestas que plantea Izquierda Unida”.
Partiendo de la base de que apoyo totalmente esta modificación puesto que la actual ley beneficia a los grandes partidos (PSOE y PP) además de a los nacionalistas, creo que ese no es el camino a seguir por parte del partido de izquierdas. ¿Por qué? Pues porque como indicaba la misma información, la iniciativa de Lara realizar reuniones entre los portavoces de los distintos grupos parlamentarios sólo había recibido la respuesta de Díez. Es decir, parece que los demás pasan bastante del tema con lo que veo complicado que haya avances.
Por el contrario, me parece mucho más eficaz seguir el camino marcado por IU en Guadalajara respecto a la polémica entorno a la disminución de autobuses entre Madrid y la capital alcarreña por parte de la empresa Continental Auto.
Resumiendo la polémica, la empresa redujo durante el pasado verano el número de expediciones entre ambas ciudades con al argumento (lógico) de la menor afluencia de pasajeros. El problema se produjo al finalizar el verano, aumentar el volumen de usuarios, pero mantener el número de viajes entre ambas ciudades.
La coalición denunció el caso en el Ayuntamiento alcarreño y adoptó una serie de medidas de presión que, con el apoyo popular, forzaron a la empresa y a la Consejería de Ordenación del Territorio y Vivienda de la Junta de Comunidades a reunirse y a enderezar la situación el pasado martes.
Pese al incremento prometido y que ya se refleja en el día a día de la empresa de transportes, creo que no igualan su oferta anterior, si bien es cierto que minimizan un problema serio y grave (en numerosas ocasiones, muchos viajeros tenían que hacer el trayecto de pie con el consiguiente peligro en caso de accidente).
No obstante, no cabe duda de que las gestiones realizadas por el concejal José Luis Maximiliano y su grupo han favorecido a un importante número de personas. Un potencial caudal de votos para las próximas elecciones. Y es que, al fin y al cabo, hay que ganarse el voto en la calle.
Y con más votos, más representación en el Parlamento (a pesar de la injusta Ley electoral). Y con más representación, más fuerza para hacer oír tu voz y forzar modificaciones en la Ley electoral.